Entre las evidencias que la Fiscalía de Nueva York tiene contra Salvador Cienfuegos Zepeda, el titular de la Secretaría de la Defensa Nacional (Sedena) de Enrique Peña Nieto, figuran “miles” de mensajes de texto que muestran cómo, a cambio de sobornos, el general ayudó al cártel H-2 a “operar con impunidad en México” y a “traficar miles de kilogramos de cocaína, heroína, metanfetamina y marihuana a Estados Unidos, incluyendo Nueva York”.
Y no sólo esto: también hubiera encabezado “la detención y la tortura de traficantes de una organización rival por parte de agentes mexicanos, la liberación de integrantes del Cártel H-2 de cárcel”, de acuerdo con una carta que la fiscalía neoyorquina envió hoy a la jueza Carol Amon, quien llevará la audiencia del militar en Los Ángeles hoy.
El militar, quien encabezó el aparato militar mexicano durante seis años, “se aseguró que no hubiera operativos militares contra el Cártel H-2”, lanzó “operaciones militares contra otras organizaciones de tráfico de drogas”, ubicó “transporte marítimo para cargamentos de droga”, actuó para “expandir el territorio controlado por el Cártel H-2 hacia Mazatlán y el resto de Sinaloa”, e introdujo “los líderes del Cártel H-2 a otros funcionarios del gobierno mexicano dispuestos a ayudar a cambio de sobornos”.
El H-2 se refiere a la organización del Cártel de los Beltrán Leyva encabezada por el capo sinaloense Juan Francisco Patrón Sánchez, apodado “el H2”, quien fue abatido en febrero de 2017 en Tepic, Nayarit, durante un operativo de la Secretaría de Marina; el hombre había tomado el control de la operación después de la detención de Alfredo Beltrán Leyva, “El Mochomito”.
Entre diciembre de 2015 y febrero de 2017 –fechas en las que se imputan los delitos a Cienfuegos–, la organización de Patrón Sánchez distribuyó “miles de kilogramos” de drogas a ciudades de Estados Unidos, y traficó cientos de armas a México, donde además “perpetró innumerables actos de violencia terrorífica, incluyendo tortura y asesinatos”.